Expo Zaragoza y la labor de los voluntarios

La Expo de Zaragoza está llegando a su fin. 11 días y el espectáculo más grande que ha vivido la ciudad de Zaragoza en su historia habrá concluido.

Han sido muchos días de ilusión, muchas visitas, muchas colas, muchos conciertos y, sobre todo, mucho trabajo. Trabajo que ha recaído en muchísimo personal, desde los mandos a los trabajadores, pasando por los 50.000 voluntarios que han sido la gran innovación en esta Expo.

El voluntario ha jugado un papel fundamental. 15.000 de ellos han recibido una formación específica para trabajar diariamente en la atención personalizada al visitante. Han sido una marea azul que ha puesto en evidencia la capacidad de actuación y movilización social como factor de desarrollo ya que gracias a ella y a los miles de trabajadores, la Expo ha caminado desde el 14 de junio con paso firme de 9 de la mañana a 3 de la madrugada.

También se termina, como el verano, la ilusión de tantos y tantos voluntarios que han realizado intachables tareas. Este verano les ha servido para especializarse en el trato con personas, en la animación sociocultural, en la información al visitante,…

Ahora regresarán a su vida normal con una experiencia gratificante en su corazón, en su álbum de fotos, en su agenda de conocidos, con la satisfacción de haber formado parte de algo grande.

Pero muchos van a sufrir una decepción. La decepción de trabajar en sus empleos de siempre, de volver a estudiar, de ser ama de casa o jubilado. A muchos les quedará ese gusanillo de hacer algo por los demás, de sus tareas en la Expo, su atención a las personas.

No vamos a mentir, ser voluntario es duro. Llevar tu vida normal y además estar disponible para cualquier trabajo a cualquier hora es complicado. El cansancio de la vida diaria se multiplica y también los problemas. Aunque, para muchos también se multiplican las alegrías y las satisfacciones.

A estos puede que les ocurra una cosa al volver a la rutina. Al llegar el 15 de septiembre puede que se den cuenta que han encontrado una vocación que les llena más que su antiguo trabajo, que aquello a lo que pensaban dedicarse o que estar con las tareas de la casa todo el día.

Muchos de estos voluntarios decidirán en octubre convertir su voluntariado en una profesión. Hay cientos de nuevas profesiones, o no tan nuevas pero que antes no eran consideradas como tales. Lo importante es la formación para hacer cualquier trabajo con calidad.

Estos voluntarios decididos a seguir su nueva vocación deberán emprender una mínima formación antes que buscar empleo. Puede adquirirse al mismo tiempo que se trabaja, también,  gracias a la cantidad de cursos existentes en la modalidad  de formación a distancia.

Formarse como animador turístico, educador sociocultural, recepcionista, ayuda a domicilio, animador deportivo de la tercera edad, en atención al cliente, etc. es la única forma de alcanzar el objetivo para pasar de voluntario a profesional.

Muchos pensarán en esta opción, muchos voluntarios encontrarán un nuevo camino y, MasterD, una vez más estará presente en la Expo, ya que dará salidas profesionales a muchos de estos voluntarios al poseer una gran variedad de oferta formativa que incluye todas esas profesiones.

Si eres uno de estos voluntarios de la Expo Zaragoza 2008 que deseas reorientar tu labor profesional, no dudes en consultar a MasterD para perseguir tu nueva vida.